UNA ALIANZA SINDICAL “histórica” para defender a 'Las seis de La Suiza':
“No podemos agachar la cabeza”
(No corren buenos tiempos para el sindicalismo, o dicho con más precisión, ser sindicalista no está exento de mil riesgos y peligros. Si hacemos bien nuestro trabajo y comprometido con lo que creemos, terminamos encontrándonos a un concejal chulesco y desagradecido, al recién promocionado a capataz con amnesia, o al advenedizo sin más méritos propios que su obediencia debida. Desde los tiempos Rajonianos hasta hoy, poco ha cambiado el marco legislativo que nos comprime y nos aprieta… siguen sin abolirlo). -HACER SINDICALISMO NO ES DELITO -
Una quincena de sindicatos anuncian movilizaciones contra la sentencia del Supremo que ratifica la condena a tres años y medio de prisión a seis sindicalistas, porque supone una “coacción y represión” contra la lucha sindical.
— 'Las seis de La Suiza' afrontan su ingreso en prisión “con coherencia” por apoyar a una trabajadora en un caso de acoso
No es habitual ver en la misma mesa a representantes de organizaciones sindicales como la CNT, la CGT, Comisiones Obreras, UGT, Solidaridad Obrera, Co.Bas o el SAT. La doble condena a 'Las seis de La Suiza', que deberán afrontar tres años y medio de cárcel, ha puesto de acuerdo a una quincena de sindicatos, que han denunciado este sábado la “ofensiva contra el derecho sindical” y han recordado que “gracias a las luchas de la clase trabajadora” se han conseguido “las mejoras laborales y sociales” de las que la ciudadanía disfruta hoy en día
El Supremo confirmó en junio la condena a tres años y medio de prisión a las 'Las seis de La Suiza', al considerar que las concentraciones frente a la pastelería constituyeron un delito continuado de coacciones graves y otro de obstrucción a la Justicia. A juicio del Tribunal, sus acciones, ocurridas en 2017 en solidaridad con una trabajadora, también condenada, que denunció a su jefe como presunto autor de sendos delitos de acoso laboral y sexual, que finalmente se archivaron, provocaron el cierre del negocio.
La sentencia, consideran los sindicatos, supone un duro golpe que pretende dejarlos con las manos atadas. “No podemos permitir que se nos vaya a acusar de delitos por practicar, simple y llanamente, las tácticas y las maneras de trabajar del sindicalismo”, ha reivindicado la secretaria general de la CNT, Erika Conrado, que ha considerado el pronunciamiento del Tribunal un “atropello para las organizaciones sindicales a pie de calle”. “La actividad sindical nunca debe ser considerada delito”, ha reclamado.
Durante la rueda de prensa de este sábado, Herminia, la portavoz de Sofitu, el grupo de apoyo y solidaridad con 'Las seis de La Suiza', ha recordado que lo que hicieron estas sindicalistas fue, simple y llanamente, “acción sindical”. “Se intenta la negociación, no hay negociación y se pasa a la movilización. No hay otra”, ha explicado antes de recordar que las concentraciones frente al centro de trabajo estaban autorizadas por la Delegación del Gobierno, en aquel momento del Partido Popular, y que en ellas no hubo “ninguna intervención policial”.
“Es un ataque directo a todo tipo de sindicalismo”, ha coincidido el secretario general de la CGT, Miguel Fadrique. “Pese a las diferencias históricas que hemos tenido, tenemos una historia común que nos une. Ante esta grave situación, no podíamos hacer otra cosa que estar a su lado”, ha indicado para reclamar “una respuesta contundente para que las compañeras no entren en la cárcel”. Por el momento, la CNT estudia llevar la sentencia ante el Tribunal Constitucional y el próximo jueves, día 18, se convocarán concentraciones en varias ciudades. “Lo que no podemos hacer es agachar la cabeza, tenemos que dar apoyo a las compañeras, no las vamos a dejar solas”, indicó Conrado en un mensaje que han compartido todas las organizaciones sindicales. “El indulto a estas compañeras sindicalistas y a todas y todos los reprimidos por luchar debería ser una prioridad para cualquier gobierno que se considere progresista”, han reclamado desde el Sindicato de Comisiones de Base.
“Retorciendo las leyes”
“Esto no es nuevo, estamos viviendo desde hace tiempo una constante represión de la movilización social, o retorciendo las leyes que nos amparan o mediante la utilización de la ley mordaza, que ya debería haber sido derogada”, ha reclamado la responsable de Institucional de CCOO, Carmen Vidal. El vicesecretario general de política sindical de UGT, Fernando Luján, ha mostrado también su “preocupación” por la deriva judicial y ha señalado que esta sentencia “coincide en el tiempo con otra que absuelve a unas personas que han estado acosando durante siete meses, en las puertas de su casa, a un vicepresidente del Gobierno (Pablo Iglesias) y a una ministra de Igualdad (Irene Montero)”. “Eso fue susceptible de absolución y una concentración con banderas autorizada pidiendo que se respeten los derechos básicos de una personas son coacciones graves. Esta deriva tiene que parar”, ha reclamado.
Durante la comparecencia, los portavoz de las organizaciones sindicales han recordado otros casos de condena a la actividad sindical que marcan esa “deriva autoritaria”. El pronunciamiento del Supremo “ocurre en el marco de sucesos como el de 'Los 8 de Caixabank', el de Raquel Rodríguez en la huelga de metal de Cádiz o los trabajadores del metal, sometidos a una presión penal constante”, ha enumerado el secretario de organización de Solidaridad Obrera, José Luis Carretero, que ha señalado que el Supremo “vacía de contenido el artículo 28 de la Constitución”, que reconoce el derecho a la libertad sindical. “Ataca a los elementos de flotación del sindicalismo en uno de los sectores más importantes, porque el 80% del empleo se desarrolla en el marco de las pequeñas empresas”, ha recordado.
En la mesa estaba también Víctor Jiménez, miembro de la Asamblea Nacional del SAT y condenado por asaltar un supermercado, en una acción enmarcada en lo que denominaron “expropiación de alimentos” de primera necesidad para repartir entre colectivos vulnerables. “Nosotros, como sindicato, hemos sufrido la represión periódicamente”, ha dicho, pare señalar que “el juez que condena a estas mujeres es conocido en Gijón, porque es el mismo que condenó a Cándido y Morala”.
-Recordemos la historia - #6deLaSuiza:
6 sindicalistas en Asturias enfrentan amenaza de prisión por persecución sindical.
Tras ser ratificadas en tribunales anteriores, el Tribunal Supremo decidirá sobre la sentencia que podría condenar a prisión a seis sindicalistas de CNT
Tras ser ratificadas en tribunales anteriores, el Tribunal Supremo decidirá sobre la sentencia que podría condenar a prisión a seis sindicalistas de CNT por el conflicto sindical contra el acoso a una trabajadora en la Pastelería La Suiza de Xixón en 2017.
El pasado 15 de junio la CNT convocaba una manifestación en Xixón en apoyo a las sindicalistas represaliadas conocidas como las 6 de La Suiza. Estas compañeras enfrentan un proceso judicial que supone un verdadero ejemplo de connivencia entre la patronal y los jueces, y de persecución a la actividad sindical. Hoy martes 18 de junio, el Tribunal Supremo decidirá sobre la sentencia del caso, una decisión que de ratificarse sentaría un peligroso precedente para dar, aun mas alas a la sistemática vulneración del derecho a huelga y la persecución judicial a la libertad sindical.
El caso de la Pastelería “La Suiza” comienza cuando una empleada de esta acude a la CNT de Xixón denunciando unas condiciones de trabajo pésimas que incluyen jornadas extenuantes sin apenas descanso semanal, salario inferior al convenio y horas extras no remuneradas. Además, enumera constantes abusos por parte de su jefe, desde obligarle a cargar sacos de harina estando embarazada, lo que le provocó una amenaza de aborto que le obligo a estar de baja, hasta situaciones de supuesto acoso sexual en el lugar de trabajo como comentarios, insinuaciones etc.
Cuando acude al sindicato está a punto de agotar su baja por maternidad y debe reincorporarse al puesto, al tiempo que, tras la amenaza de aborto el novio de la trabajadora se presentó en el centro de trabajo y amenazó el empresario, por lo que tenía un juicio pendiente con el jefe.
Los servicios jurídicos del sindicato toman el caso a la vez que el equipo de acción sindical de CNT Xixón recopila información y se ponen en contacto con la pastelería a fin de pactar la salida de la empresa, mientras preparan una denuncia por acoso. Por su parte, el propietario se niega a mantener ningún tipo de reunión por lo que la CNT convoca dos concentraciones de denuncia de las condiciones laborales frente a la pastelería. Tras ellas, la empresa acude a una reunión en la que no logran acuerdo.
Es a partir de aquí que siguen convocando concentraciones y se avanza en el terreno judicial, a la vez que empieza una autentica campaña de persecución a las sindicalistas. Tres compañeras son detenidas a la salida de su casa, varios afiliados son multados y el sindicato es sancionado. El empresario de La Suiza denuncia al sindicato y sus militantes. Tras unos meses, la pastelería cierra y el conflicto entra en una auténtica batalla judicial. El empresario y su hijo interpusieron más de una treintena de denuncias contra la CNT de Xixón y sus militantes.
La empresa presentó tres denuncias penales contra militantes de la CNT por obstrucción a la Justicia, coacciones y amenazas durante las reuniones que las denunciadas mantuvieron con el empresario, donde informaban de los puntos fundamentales de una negociación, la salida de la empresa de la trabajadora y el pago de los conceptos adeudados.
La segunda denuncia acusaba a CNT de extorsionar empresarios en los conflictos laborales para financiarse. Se abrió una investigación por delito de asociación ilícita y el sindicato aportó sentencias de la sección laboral, acuerdos judiciales de todos los casos y demostró que cualquier cantidad satisfecha a un trabajador es ingresada en la cuenta de este, no en la del sindicato.
La tercera, contra el secretario general de la CNT de Xixón en aquellos momentos, por obstrucción a la Justicia, coacciones y amenazas en una reunión en el despacho con el abogado de los denunciantes y estos mismos, entendiendo que plantear la retirada de la denuncia contra el novio de la trabajadora para encontrar una solución global al conflicto era un acto delictivo. En los tres casos el juzgado determinó que no había causa y procedió a sobreseer provisionalmente el caso, la decisión fue ratificada por la Audiencia Provincial.
Además, la CNT y varios de sus militantes fueron denunciados por supuestos delitos de amenazas de muerte contra el empresario y su hijo. De los 6 juicios, 5 fueron absolutorios y uno condenatorio. Durante el año 2023 el empresario ha puesto otras dos denuncias, en ambos casos por contar en un programa de radio, en que también se denunció a la periodista, por un lado, cómo había sido el proceso de acompañamiento a la trabajadora y cómo esta refería situaciones que podrían catalogarse como acoso.
El juzgado archivó el caso, pero este ha sido recurrido. Por otro, se denuncia a un compañero por manifestar su disconformidad con la denuncia, el desarrollo del juicio, la sentencia y por señalar el historial del juez, muy hostil al sindicalismo y los movimientos sociales desde hace décadas. El juzgado archivó el caso.
La trabajadora presentó dos denuncias, ante el juzgado de lo social por motivos salariales, y ante el de lo penal por acoso sexual. La primera fue aplazada hasta que se resolvieran las denuncias de la empresa contra la trabajadora, y la segunda fue archivada por falta de pruebas. Tras sobreseerse la denuncia por acoso sexual, el empresario denunció tanto a la trabajadora como a su letrada por un delito de denuncia falsa que fue archivada inmediatamente.
Tanto la acusación como el Ministerio Fiscal reconocieron que no había pruebas fehacientes de que nadie hubiera cometido un delito, pero una vez recurrida la sentencia a la Audiencia Provincial, esta se pronunció haciendo pública la sentencia de la Audiencia Provincial que confirmaba la condena de 3 años y medio de prisión para 6 de los 8 condenados, entre ellas la trabajadora. Una sentencia que, de ratificarse, podría ejecutarse en las próximas semanas.
Las represaliadas, que lo son por haberse organizado por los derechos de la clase trabajadora, son personas en algunos casos con familiares a su cargo que pueden verse obligadas a ingresar en prisión. Esta sentencia, de llevarse a cabo abre la vía a condenar a miles de personas por movilizarse ante un conflicto sindical.
Durante este, se han vivido situaciones surrealistas y de claro trato de favor al empresario e inquina contra la CNT y la trabajadora, que desde el sindicato achacan a la situación privilegiada y las relaciones económica y políticas de la familia propietaria de “La Suiza” y sus abogados, con el PP y la policía de Xixón, así como la ideología e historia del juez Lino Rubio Mayo, conocido por las condenas a sindicalistas como los trabajadores de Naval Xixón en la década del 2000 y a insumisos.
Con gobiernos que se digan progresistas o no, la justicia capitalista ha ido avalando las reformas laborales que amparan todo tipo de abusos patronales y también legisla, detiene y encarcela al gusto del empresario, como se ha visto en este caso.
El aparato judicial del estado es la herramienta con la que un poder no electo y ligado por mil lazos políticos, económicos o incluso sanguíneos con las mayores fortunas del país o instituciones como la corona interviene en todos los órdenes sociales en favor de los poderosos. El caso de los 6 de La Suiza es un ejemplo brutal de esta realidad, pero sucede junto a cientos de represaliados, por luchar en otras causas o por otros delitos de opinión, desde sindicalistas, jóvenes antifascistas como los 6 de Zaragoza, activistas por la vivienda, artistas, etc. También por migrar, con los CIEs encarcelando a cientos de personas por este "delito", que se une al aparato criminal de las leyes de Extranjería, las fronteras y las masacres como la de Melilla.
Extendamos la solidaridad y la organización desde las bases, levantando un frente común que pelee contra la represión por la amnistía para todas las luchadoras y luchadores, la derogación de la ley Mordaza, la ley de Extranjería y contra la judicatura heredada del franquismo.
Hoy en el Tribunal Supremo se juzga a 6 personas por llevar a cabo acción sindical en este país. Desde Izquierda Diario estaremos muy pendientes de la resolución y mandamos toda nuestra solidaridad con las 6 de Xixón y con todas las represaliadas por luchar.